Habitación superior, balcón a la calle sobre la entrada, aire acondicionado, calefacción central y televisión . Cama de 1,80 m. y bañera completa.

Baracoa, nombre de la región desconocida de la bellísima Cuba. Con el sabor tropical, de selva y naturaleza que combinada con las playas que la adornan hace que parezca imposible que además tenga en su capital del mismo nombre una belleza semejante. 

Nuestra habitación con el balcón frente a la plaza, como proa de este pequeño navío, cargado de ilusiones que surca el valle rumbo al puerto de Casillas. Amplia y exquisita como el alma de Cuba.

En el marco del bellísimo Panamá, puente del mundo por excelencia, país donde se abolió el ejército hace 30 años, El Valle de la Luna, como lo llamaron los indígenas, ofrece excelentes atractivos turísticos, hermosas playas como la de Las Lajas, altas montañas de inigualables paisajes y refrescante clima, combinados con la naturaleza indígena Guaymíes y su fauna.

Copán, en Honduras, está situada cerca de San Pedro Sula, la mítica ciudad-estado Maya que aún nos sigue sorprendiendo entregándonos poco a poco sus secretos. Hasta hoy se ha descubierto apenas una quinta parte de la antigua ciudad y la Atenas del mundo Maya nos continúa maravillando día a día con cada descubrimiento. 

En el corazón de Costa Rica, el pequeño pueblo colonial de Orosi está localizado en el encantador Valle de Orosi, una delicia para los amantes de la naturaleza ya que en sus alrededores se encuentra unos paisajes majestuosos, escenarios pintorescos y una sorprendente vista del Reventazón. Orosi ofrece un clima mnçifico, una tierra fértil, un exuberante verde y se encuentra situado en la base del volcán Irazú, que permite al visitante ascender hasta la misma cima que presenta un enorme cráter, situado a 3.450 m. de altitud.

En Guatemala, Tikal, en la región de El Petén, la ciudad más poblada en la civilización Maya, la de templos más altos y numerosos entre los que la selva nos ha dejado conocer, capital del imperio construido por civilizaciones durante más de un milenio y que por alguna razón, que aún no conocemos, un día sus ciudadanos abandonaron y se marcharon a las montañas.